Más allá de ser deliciosos los frutos secos, según la revista científica The New England Journal of Medicine (NEJM), disminuyen un 20% menos de probabilidad de morir por motivo de alguna enfermedad. Eso sí, son consumidos siete o más veces por semana
En todo momento. Los nutricionistas destacan que el consumo frecuente de frutos secos no genera un aumento de peso y por el contrario, ayuda a reducir la circunferencia de cintura y disminuye el riesgo de obesidad.
Almendra. Si consumes 23 almendras tendrás la tercera parte de la vitamina E que tu cuerpo precisa. Además, las almendras te protegen de los radicales libres y absorben grasas. Las puedes consumir en recetas dulces o saladas, ya sea espolvoreadas, procesadas, como leche, relleno, para salsas, como mantequilla y mucho más.
Nuez. Contiene ácidos grasos Omega 3, cuyas propiedades más destacadas son mejorar los niveles de colesterol, no permitir el aumento de peso, proteger el corazón, disminuir la degradación de los huesos, entre otras.
Maníes. Con mucho folato ayuda en el desarrollo del cerebro y protege del deterioro cognitivo. Son recomendadas en las mujeres embarazadas y en los vegetarianos, por contener ácido fólico, vitamina E y grasas saludables.
Pistachos. Contienen nutrientes benéficos porque sirven para reducir los riesgos de padecer degeneración muscular por la edad, principal causa de la ceguera en los ancianos.
Avellana. Por su contenido en ácido fólico previene enfermedades del corazón y degenerativas, como el Alzheimer. A su vez, sirve para relajar la sangre y los vasos sanguíneos.
Nuez lisa. Sorprende su alto contenido en ácidos grasos saludables. Son ideales a la hora de bajar el colesterol alto. Tiene bastante contenido en fibra y ayudan en el cuidado y protección del sistema cardiovascular.
No hay comentarios:
Publicar un comentario