“Se debe moler dos cucharadas de semillas de espárrago hasta que se forme una pasta compacta. Luego mezclar con un poco de agua hervida fría y aplicar sobre la zona afectada como si fuera una crema. Dejar actuar de 30 a 40 minutos y quitar con agua tibia”, dice Rebeca Ordóñez, una awicha de 73 años, que sugiere evitar el consumo de cítricos.
También sirve mezclar cuatro gotas de aceite de lavanda y dos de girasol (se venden en el supermercado) y colocarlas sobre la zona afectada, haciendo suaves masajes, hasta que la piel las absorba.
“Otra idea es hervir una taza de agua y agregar dos cucharas de hojas machacadas de salvia y dos ramas de tomillo, dejar reposar y entibiar. Separar en dos partes: una para colar y hacer gárgaras mientras el agua esté tibia y otra para una compresa. Colocar las hojas dentro de una gasa y, remojándola en la infusión, poner sobre la zona afectada”, explica la abuela.
Jengibre
Prepara una pasta con la raíz fresca de jengibre, aplanando o cortando pequeños pedazos con ayuda de un tenedor. Coloca directamente sobre la inflamación, que se prevé disminuirá rápidamente.
Las paperas
La parotiditis o paperas es una enfermedad contagiosa que puede ser aguda o crónica. Se localiza en una o ambas glándulas parótidas, detrás de las ramas ascendentes de la mandíbula. Hoy, los casos son muy pocos, pues hay vacuna.
No consumir condimentos
No consumas especias o condimentos o alimentos ácidos, como cítricos, porque hacen que aumente la salivación y causan dolor. Tampoco tragues comida fría o muy caliente: los cambios bruscos provocarán molestias.
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