jueves, 5 de septiembre de 2013

Plantas medicinales prácticas y naturales

PARA CADA AFECCIÓN, HAY UNA PLANTA

LA MANZANILLA

La llamada común o romana es la más conocida y aplicada en nuestro medio por los variados usos en la medicina, la cosmética y la perfumería. Desde la antigüedad, son reconocidas y apreciadas sus propiedades para las enfermedades relacionadas con la mujer. Asimismo, para dolores estomacales, cólicos, asma, reumatismo, calambres y la ansiedad. La infusión de las flores de manzanilla es un recurso eficaz. Igualmente, es un remedio sorprendente por su acción antiinflamatoria y cicatrizante. En casos de gripe, catarros y bronquitis, las inhalaciones del vapor de la infusión de manzanilla son especialmente efectivas.

BOLDO

Es por excelencia un tónico digestivo. Los aceites esenciales y la aplicación de cataplasma en el área afectada tienen propiedades sedantes en el tratamiento del reumatismo, la artritis y las contusiones. Excelente diurético, controla el ácido úrico y se lo aplica eficazmente para aliviar problemas urinarios. En combinación y dosificación adecuada con otras plantas, se utiliza en tratamientos del sistema nervioso y también para combatir las amebas.

LLANTÉN

En nuestro medio se utiliza el llantén debido a sus propiedades antiinflamatorias y su gran contenido de mucílago, eficaz para combatir problemas a nivel respiratorio. Es un cicatrizante excepcional. En problemas de úlceras, se aconseja beber en ayunas llantén con zumo de papaya y limón. El jugo de llantén se usa para aliviar el dolor de muelas y la otitis. Es antiséptico y astringente.

EUCALIPTO

Se conocen más de 450 especies. En el ámbito de la medicina se aprovechan las resinas, tinturas y gomas que son utilizadas como fármacos, astringentes y cicatrizantes. Los vapores de la infusión del eucalipto se aplican como descongestionantes y expectorantes en las afecciones respiratorias. También se utilizan pomadas y ungüentos para las afecciones musculares y dolores de huesos. Además, es curativo inhalar los vapores, usar los enjuagues bucales, preparados dentales y jabones de eucalipto. Los baños de esta planta suelen ser un alivio rápido y

efectivo para el reumatismo. El dolor que producen las várices se alivian con un emplasto frío de eucalipto y nogal.

EL USO SEGURO PARA SU APLICACIÓN

Igual que con cualquier medicina preventiva o curativa, hay que tener en cuenta que el uso continuado o regular de las plantas medicinales requiere de ciertas precauciones, aunque se trate sencillamente de un vaho con eucalipto, un cocimiento de valeriana o un mate de coca.

CAUSAS

Es importante encontrar lo que provoca un trastorno. Cualquier síntoma requiere el diagnóstico médico de profesionales competentes. Cada organismo reacciona diferente a los tratamientos medicinales de cualquier índole.

INFORMACIÓN

Es primordial tener la precaución necesaria al utilizar una planta, ya sea por un periodo corto o a largo plazo. Por lo tanto, conviene recurrir a un especialista para informarse sobre los efectos positivos o negativos que nos pueden causar.

manejo

Se aconseja usar solamente plantas bien identificadas, las cuales deben ser adquiridas con la garantía que éstas hayan tenido un proceso de higiene adecuado, ya que el agua de riego, la localización, las condiciones ambientales, la manipulación, entre otros factores, influyen en el producto y el estado de salud.

precaución

Como en la utilización de los medicamentos, se debe ser responsable y prudente con las plantas medicinales, específicamente con las mujeres embarazadas y los niños.

Una medicina eficaz y tradicional

Orietta Olea

Relacionadora Pública de Aleph

El empleo de las plantas y hierbas se conoce desde la aparición del hombre sobre la Tierra. Si nos remontamos a nuestros antepasados, encontramos que las únicas medicinas que se conocían eran las plantas medicinales. La experiencia adquirida por los galenos, yatiris y monjes medievales en las distintas civilizaciones y culturas, tanto en su tratamiento como en sus aplicaciones, han sido trasmitidas de generación en generación a través de la tradición y los herbarios.

En la actualidad, la fitoterapia y el uso de las plantas en provecho de la salud se han convertido en una ciencia. Lo que antaño no era más que un empirismo se aplica hoy mediante la determinación de las sustancias activas y la investigación de sus efectos. Es así que en el presente se utilizan las plantas medicinales con éxito en la vida diaria en todas partes del mundo.

Los principios activos de las plantas medicinales son sustancias que la planta sintetiza y almacena en el curso de su crecimiento con ayuda del metabolismo. Sin embargo, no todos estos productos metabólicos tienen un valor medicinal directamente aprovechable, ya que al mismo tiempo que los principios activos, existen en todas las especies las llamadas sustancias indiferentes o lastre, que son las que determinan la eficacia del medicamento vegetal o hace más lenta la absorción de los primeros en el organismo. Ésta es la primera de las peculiaridades de los medicamentos de origen vegetal.

Por otra parte es muy importante tener en cuenta que, así como hay en la naturaleza plantas altamente eficaces y medicinales, hay también tóxicas y venenosas, las que evidentemente se las debe excluir de los recetarios caseros. Por lo que se tiene que ser cuidadoso con el uso, la identificación, la selección y más aún en el consumo de plantas medicinales, ya que exige un máximo de precauciones, con el fin de evitar posibles confusiones peligrosas. Su clasificación debe basarse siempre en un minucioso estudio y una seguridad absoluta, por lo que ante la menor duda deberá renunciarse a su utilización.

Las plantas medicinales son especialmente valiosas para el tratamiento de las afecciones más comunes y para las enfermedades crónicas aplicadas en forma de infusión, tintura, maceración, extracto, decocción, compresas, baños, inhalaciones o como especialidad terapéutica en base a determinadas sustancias contenidas en ellas. Es muy frecuente que no se utilice todo el ejemplar, sino solamente algunas partes del mismo, ya que las sustancias activas se encuentran algunas veces en la raíz, otras en las hojas y otras en la corteza o en las flores.

La naturaleza, mediante las plantas medicinales, nos propone remedios sencillos de aplicar, elementos que preparados alivian aquellos síntomas que no por ser frecuentes resultan menos molestos. En esto radica la importancia de conocer más profundamente los estudios científicos y las experiencias de quienes más saben sobre las mismas, incluyendo la recolección, la manipulación, los efectos, las aplicaciones, las contraindicaciones y las falsedades y verdades, en un mundo de brillantes progresos científicos nos lleva a conocer lo más íntimo de nuestras células.

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