Tradicional. Uno de los más conocidos es el té negro, que tiene este color debido a la oxidación de la hoja, explica la nutricionista y dietista Carla Jiménez. Al estar compuesto por metinxaltimas como la cafeína, teofilinia y la teombromina resulta ser un estimulante, disminuye la fatiga y el sueño.
Previenen enfermedades. No pueden faltar el té verde y el té blanco que son ricos en catequinas; asimismo, son polifenoles de la familia de los flavonoides y tienen las características de ser antioxidantes, prevenir problemas de artritis, cardiacos, trombosis y cáncer. “Según las estadísticas en países que toman té como Japón y China los niveles de cáncer son menores”, dijo la especialista.
Cuidado con lo que toma. Si bien en el mercado existen variedades de té es necesario conocer sus características ya que en el mercado han surgido bastantes variedades de “té chino”, pero cumplen una función laxante y lo único que hace es estropear los jugos gástricos, lo que puede desencadenar otros problemas, resalta Ariani Roda, propietaria de “La casa del té”. //
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