La linaza, un alivio para la fiebre y riñones inflamados

Por las propiedades curativas de la linaza, esta semilla es utilizada para el alivio de diversos problemas de la salud de las personas, como así también para la prevención. Los médicos naturistas recomiendan su consumo para evitar las enfermedades inflamatorias y disminuir la fiebre.

En el caso de Tarija, la venta de refresco de linaza se masificó con el transcurso de los años, eso se lo puede evidenciar en las calles y mercados de la capital chapaca, donde las vendedoras se encargan de no hacer faltar el producto.
Pero también es cierto que por sus aportes nutritivos, las industrias se interesaron en procesarla y poner a la venta en diferentes presentaciones, como galletas, aceite, pan, refresco pasteurizado, entre otros.
Para la naturista y coordinadora del Programa de Fortalecimiento a la Medicina Tradicional (Profomet), Teresa Mur, esta semilla proveniente de la planta del lino es considerada como maravillosa por su sector. Pero la población la consume sin conocer los beneficios que le aporta a su salud y la manera ideal de ingerirla.
Recomendó no colar la linaza, porque en el espesor están concentrados todos los nutrientes. Asimismo, indicó que hay que dejar reposar la semilla en agua fría por lo menos una noche, para recién poder ingerirla al otro día, pura o mezclarla con otros jugos naturales y tomar en ayunas
Mur señaló que por su “fabuloso” aporte nutritivo es recomendable para las personas que sufren de estreñimiento, porque a través de su consumo diario se fortalece la fibra intestinal y restablece el organismo.
De igual manera, sostuvo que se lo puede utilizar en forma de cataplasma fresca, para lo cual, se debe moler la semilla y mezclarla con claras de huevo, para posteriormente aplicarla encima de los riñones, en la frente en caso de fiebre, o en el estómago para los problemas de diarrea por calor.
Por otro lado, el módulo III “Propiedades y Efectos Terapéuticos de las Plantas Medicinales”, hace referencia a otros aportes curativos para la salud.
Entre ellos, aconsejan el jugo de la raíz en gotas para las afecciones en los ojos, porque actúa como un eficaz colirio. Para aliviar las almorranas se utiliza el jugo de las hojas aplicadas en las partes afectadas.
Para las disenterías, inflamaciones estomacales y dolencia de los riñones y vejiga, se utilizan las semillas que deben recolectar en floración y secar a la sombra.
Como diurético y para las hemorroides emplear el cocimiento de 50 gramos de semilla en un litro de agua fría, hervir 10 minutos a fuego lento, filtrar, endulzar con miel de abejas y tomar una tasa después de las comidas.
Como contraindicación, el texto indica que no se debe utilizar harina de linaza vieja, porque su uso externo puede producir dermatosis.



Una semilla milagrosa para males degenerativos

Investigadores del Instituto Científico para el Estudio de la linaza de Canadá y de Estados Unidos, enfocaron su atención en el rol de esta semilla en la prevención y curación de numerosas enfermedades degenerativas, como el cáncer.
Según este instituto, la semilla de linaza contiene 27 componentes anticancerígenos, uno de estos agentes es la lignina. Este producto contiene 100 veces más que los “mejores” granos.
Aseguran que ningún otro vegetal conocido hasta ahora posee propiedades iguales a la linaza. Lo consideran como un protector en contra de la formación de tumores. Sólo en el cáncer se recomienda combinar semilla de linaza molida con queso cottage bajo en calorías.
Mediante este estudio verificaron que es ideal para acabar con la arteriosclerosis, elimina el colesterol adherido en las arterias, esclerosis múltiple, trombosis coronaria, alta presión arterial, arritmia cardiaca, asma, incrementa las plaquetas en la sangre.
Asimismo, su consumo frecuente disminuye el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Una de las características es que contiene una sustancia llamada prostaglandina, la cual regula la presión de la sangre y la función arterial.