El consumo de semillas de papaya, aunque muchos no lo crean, tiene sus beneficios, porque ayuda a proteger el funcionamiento de los riñones en casos de problemas de insuficiencia renal, por lo que médicos tradicionales, recomiendan masticar 7 semillas o pepas de papaya tres veces al día.
El consumo continuo, mejora los problemas de salud intestinales, permite acabar con enzimas proteolíticas, pueden acabar con los parásitos y sus huevecillos, son un excelente antiparasitario intestinal.
El único problema de consumir las pepas de papaya es su sabor picante que puede disminuir reduciendo el número de semillas.
La acción antihelmíntica de las semillas de la papaya es por su contenido en papaína, una enzima proteolítica que digiere las proteínas y por lo tanto disuelve la queratina o quitina que cubre el cuerpo de los helmintos intestinales protegiéndolos contra la acción de los jugos digestivos del intestino.
Las hojas de la papaya son empleadas para limpiar heridas infectadas, las semillas frescas contienen también un compuesto llamado Carpasemina que tiene acción destructiva sobre las amebas, lo que explica su clara acción terapéutica sobre algunos casos de diarreas crónicas.
También mejora los casos de insuficiencia cardiaca y crisis de taquicardia pero, igual que la digitalina, es tóxica y no debe ser usada sino por especialistas, esta es la razón por la cual los tratamientos antiparasitarios a base de semillas de papaya no deben prolongarse más de cuatro a cinco días, para ser repetidos, si es necesario, dos o tres meses después.
Esta fruta es recomendada también en casos de cirrosis hepática puede funcionar como un tratamiento alternativo, tomando la preparación de 5 semillas de papaya y a la mezcla se le añade una cucharada de limón, debe consumirse 2 veces al día, durante un mes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario