Ofrece la oportunidad de luchar de manera natural contra diversos males sin efectos secundarios, ya que sus diferentes propiedades permiten aliviar una gran cantidad de dolores sin provocar ningún efecto negativo sobre la salud. Sin embargo, se recomienda evitar los abusos porque una toma excesiva puede acarrear problemas de sueño.
La esencia contenida en esta planta permite realizar diversos productos cosméticos y alimenticios. Asimismo, es conocida por ser un excelente ingrediente en la cocina, ya que permite realizar recetas y salsas frescas llenas de sabor.
Más allá de su consumo directo, esta planta es eficaz para combatir los insectos, particularmente contra los mosquitos responsables de la malaria y otras enfermedades transmitidas por estos últimos.
Para mayor eficacia y sabor, se debe fijar que sus hojas estén frescas, verdes y sin manchas.
¿Sabías qué?
Su historia
La menta fue utilizada durante la Edad Media por sus propiedades calmantes. Mezclada con opio, servía para aliviar a los enfermos. Su nombre proviene del latín “mentha”. Ha sido consumida por sus virtudes medicinales por los egipcios, griegos y romanos. También se cultivaba en varios monasterios. Hoy en día, el cultivo de la menta se ha expandido en todas las partes del mundo. Generalmente, se cultiva la menta verde y la hierbabuena. Se suelen consumir sus hojas, pero también es frecuente sacarle su aceite esencial. Éste es muy empleado en la industria farmacéutica.
Sus usos
Para disfrutarla al máximo
interno
Puedes absorber gotas de aceite esencial de menta o bajo la forma de nebulización en casos de problemas respiratorios. También la puedes consumir en infusión para una gran variedad de malestares.
externo
Se utiliza en cataplasma y gargarismo. También se usa para masajear algunas partes de tu cuerpo que te hacen sufrir. Además, suele ser utilizada en asociación con otras esencias aromáticas.
6 propiedades para aprovechar
dolor
Si sufres de traumatismos, golpes o molestias dentales, opta por el aceite esencial de menta. Su efecto anestesia la piel. Es también descongestionante y antiespasmódica, lo que permite detener la inflamación y reducir el dolor. Aplica gotas de este aceite en las partes de tu cuerpo que te duelen y masajea. Toma en cuenta que el aceite esencial de menta es tóxico para los bebés y no recomendado para las mujeres embarazadas y los mayores.
CABEZA
Algunas investigaciones demostraron el efecto analgésico de la menta contra los dolores de cabeza. Evitando tocar los ojos, masajea tu frente con 2 gotas de aceite esencial de menta. Lo puedes diluir con un aceite vegetal si tienes la piel sensible. También puedes colocar sobre tu piel compresas húmedas impregnadas de un par de gotas de aceite de esta planta.
PICORES
Como la menta es calmante y reduce el dolor, alivia las afecciones dermatológicas como la urticaria o herpes. Generalmente, se utiliza en asociación con los tratamientos medicinales clásicos.
RINITIS
Con su poder descongestionante, la menta permite despejar las vías respiratorias en caso de resfrío o sinusitis. Su aceite esencial es eficaz para luchar contra las bacterias responsables de las afecciones respiratorias. Coloca gotas de este aceite en una taza de agua caliente y respira los vapores durante 10 minutos.
digestiÓn
Estimula el tránsito intestinal, reduce las flatulencias, gases y eructos. Además, calma las náuseas y los dolores intestinales. Se recomienda colocar 2 cucharas de menta fresca en agua hervida. Toma esta infusión después de tus comidas. También puedes mezclar 3 gotas de aceite de menta con una cucharilla de miel. Esto calma los cólicos estomacales. Ten cuidado de no consumir más de 3 infusiones o 9 gotas a diario.
ANEMIA
La carencia en hierro es frecuente. De hecho, el hierro es indispensable en la formación de los glóbulos rojos, los cuales transportan el oxígeno. Para evitar esta carencia, añade menta a tu alimentación, ya que es una fuente rica de hierro.
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